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¿Sabías las 7 Diferencias entre un jamón serrano y un jamón ibérico? Actualizado 2023

Estás pensando en comprar un jamón y no sabes por qué un ibérico es mejor, sigue leyendo...

En La Zahurda, muchos clientes nos preguntan por las principales diferencias. En este post intentamos dar un poco de luz a esta pregunta.

Aquí te mostramos las 7 diferencias entre un jamón serrano y un jamón ibérico.

  1. La raza. La catalogación de un jamón como ibérico se obtiene exclusivamente cuando al menos alcanza un 50% de pureza de raza Ibérico. El jamón serrano se obtiene de cerdos blancos en su mayoría de raza Duroc.
  1. Tiempos en la curación. El jamón ibérico se trabaja con tiempos de curación más elevados, tarda entre 24 y 36 meses, es más, dependiendo de si es ibérico o ibérico de cebo puede que el tiempo sea incluso mayor. Por el lado contrario, el jamón serrano necesita un periodo de 15 meses para estar listo y poder consumirlo.
  1. El color de la carne. El serrano tiene un color más claro que el ibérico, se podría afirmar que es un tono rosado. En cambio, el ibérico, cuenta con un color más “vivo”, con la carne más roja. Esto es gracias a la infiltración y veteado de la grasa y sus tiempos de curación elevados.
  1. Infiltración de la grasa. El ibérico cuenta con la gran característica de que infiltra la grasa en sus músculos, afirmamos que es una gran característica porque hace que sea más jugoso que la del cerdo serrano. En el caso del cerdo blanco este fenómeno no pasa.
  1. El sabor. El jamón serrano cuenta con un sabor mucho más “neutro”, sin grandes matices ni aromas intensos. Por el contrario, el ibérico, gracias a su alimentación basada en bellotas, hierbas y el ejercicio en La Dehesa, obtiene un sabor mucho más sabroso, con multitud de matices diferentes y sabores mucho más envolventes.
  1. Color de la pezuña. Aquí te dejamos un pequeño truco, ¿Te cuesta identificar el ibérico? Mira el color de su pezuña, si es negro, vas por buen camino, será jamón ibérico, de lo contrario, si es serrano tendrá la pezuña de un color muy similar al resto de la pieza.
  1. Procedencia. Como última diferencia tenemos la procedencia de la pieza, elemento clave para comprender de dónde viene cada jamón. Si hablamos de los ibéricos, únicamente existen dos países en los que se pueden producir, España y Portugal, debido a que los cerdos de raza ibérica se encuentran exclusivamente en la península. Además de por uno de sus grandes aliados, como lo es la climatología perfecta de la península. Si es jamón serrano puede proceder de cualquier país.

Esperamos que ya tengas más claro las diferencias y por ende puedas tomar tu decisión entre ibérico o serrano. En La Zahurda, sin ninguna duda te recomendamos apostar por una pieza de ibérico, pues por una diferencia de precio algo mayor la diferencia en sabor será muy notable.

LA ZAHURDA.

 

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